Ella es Lolita; no agregaré una descripción como tal, dado que cada lector merece el derecho de imaginar a éste personaje un tanto inusual como se le dé la gana. Eso sí, está dentro de mi obligación mencionar que es una mujer hermosa. Por las mañanas se levanta desnuda y siempre con un acompañante distinto; su costumbre más arraigada es mirarse al espejo con los rayos del gran aro sacudiendo el alba detrás de su espalda, mientras admira sus senos de perfecta simetría.
Lolita es la bruja del pequeño pueblo sin nombre que se encuentra en un lugar que sólo usted sabe si existe; y ella se pasea descalza y sin pena alguna por las calles de tierra -que la mayoría de las veces está repleta de gotas y de piedras-, fumando una especie de cigarrillo que ella fabrica con los deseos de las personas y sus esperanzas que se desmoronan con cada sorbo al cilindro.
Su curiosidad es su placer más grande, y sus sentidos agudizados por tanto menjurje de yerbas estimulantes y cultivos psicotrópicos que consume, le permiten que el hecho de explorar con la mano un costal de granos o sumergirse al fondo eterno de un estanque para sentarse en el suelo del mismo, sean experiencias que produzcan casi la misma satisfacción que recrear el sexo en el pasto, únicamente sobre un gabán sudado y deshilachado puesto entre el pasto y el viento.
Y así es Lolita, en un breve momento descriptivo, la bruja que temen, la que ostentan. Así es Lolita, la bruja del pueblo, una mujer que te golpea en la mente, que camina por el pueblo descalza sobre las miradas prejuiciosas y que se ríe de los estereotipos que las doñas del pequeño pueblo son nombre han creado para alejar a los muchachos, y a las muchachas, de la bruja Lolita.
Escritor, a veces. La esencia de un monstruo proyectada en letras. Dibujo un poco; amateur en todo. Vago por las calles con cigarros y una pluma siempre en el bolsillo.
Traducir texto.
domingo, 8 de noviembre de 2015
sábado, 10 de octubre de 2015
Perspectivas
Dicen los alcohólicos que para un corazón roto sirven un mezcal y ocho tequilas.
Por otra parte, pero no tan distante, los borrachos dicen que con diez caguamas basta para el olvido, la reparación y hasta para vomitar en el bar. Hermoso ¿no?
Un cardiólogo lloraría de risa y te diría que el dolor es biológico y no sentimental a pesar de que te estés deshidratando por el llanto en frente de él.
El músico lloraría contigo y escribiría una canción sobre eso a tus espaldas sin darte crédito alguno de su inspiración.
Quizá el fotógrafo te harte con su cámara y la luz del flash, pero es que él no puede perder la oportunidad de capturar la expresión de un corazón deshecho.
El sacerdote te subirá los ánimos haciéndote reír con su comprensión mal fingida y su gracioso intento por hacerte creer que Dios te recompensará más adelante; y el devoto te tomará de la mano diciéndote algo como "todo estará bien, hermano", cuando en realidad le importa un carajo y sabe que sus problemas en casa con su mujer y las deudas son peores.
El psicólogo, inútilmente, te hará ver que en realidad es una patología y no un problema tan grave; te dirá, redundantemente, que te duele porque en realidad no lo quieres superar y tu tendencia masoquista saldrá a la luz.
Estoy seguro de que el ingeniero, el físico, el químico, el biólogo y el abogado te ignorarán, porque estarán debatiendo por quién es mejor, entonces llegará el médico con su jodida vanidad puesta en forma de bata y se unirá a la discusión.
Los gatos verán tu problema y se recostarán en tus piernas, esperando a que duermas para extirpar tu alma débil, o muerta en el mejor de los casos.
Y los chaneques acechan a los gatos para que no les roben su propiedad (eso dicen ellos).
Mientras que las brujas se acercan a decirte "¿Amor, estás bien?" y besarte para hacerte sentir mejor... Evidentemente ellas ya saben que tu alma les pertenece con sólo aspirarla en cada beso, cada estertor... Ellas siempre ganan.
El artista de acuarelas dará vida a una representación surrealista (si tienes suerte, claro) de tu corazón siendo devorado por quimeras.
El escritor tomará su máquina de escribir y con sus dedos deformes te dedicará su próxima novela.
Podría apostar que el director de cine o teatro te dirá que tú y tu historia son basura, aunque para el siguiente año mires el estreno de una película u obra de teatro con el mismo ámbito que tu sufrir.
Y el poeta... evidentemente será el que agoniza y pide una explicación o remedio a todos los anteriores, mientras termina su cerveza y recibe con sincero y lívido cariño los febriles besos de la bruja, haciendo a un lado al gato y asustando a los chaneques para entregarle a la bruja los estudios cardiológicos, la canción, la fotografía, las risas que el clérigo provocó, el diagnóstico psicológico, el cuadro surrealista, la novela, la película o de preferencia la obra de teatro, los besos, el cuerpo, la eternidad, la cordura, el alma y por último el corazón roto...para que ella, y sólo ella... lo repare con un hechizo.
-Angel García.
Por otra parte, pero no tan distante, los borrachos dicen que con diez caguamas basta para el olvido, la reparación y hasta para vomitar en el bar. Hermoso ¿no?
Un cardiólogo lloraría de risa y te diría que el dolor es biológico y no sentimental a pesar de que te estés deshidratando por el llanto en frente de él.
El músico lloraría contigo y escribiría una canción sobre eso a tus espaldas sin darte crédito alguno de su inspiración.
Quizá el fotógrafo te harte con su cámara y la luz del flash, pero es que él no puede perder la oportunidad de capturar la expresión de un corazón deshecho.
El sacerdote te subirá los ánimos haciéndote reír con su comprensión mal fingida y su gracioso intento por hacerte creer que Dios te recompensará más adelante; y el devoto te tomará de la mano diciéndote algo como "todo estará bien, hermano", cuando en realidad le importa un carajo y sabe que sus problemas en casa con su mujer y las deudas son peores.
El psicólogo, inútilmente, te hará ver que en realidad es una patología y no un problema tan grave; te dirá, redundantemente, que te duele porque en realidad no lo quieres superar y tu tendencia masoquista saldrá a la luz.
Estoy seguro de que el ingeniero, el físico, el químico, el biólogo y el abogado te ignorarán, porque estarán debatiendo por quién es mejor, entonces llegará el médico con su jodida vanidad puesta en forma de bata y se unirá a la discusión.
Los gatos verán tu problema y se recostarán en tus piernas, esperando a que duermas para extirpar tu alma débil, o muerta en el mejor de los casos.
Y los chaneques acechan a los gatos para que no les roben su propiedad (eso dicen ellos).
Mientras que las brujas se acercan a decirte "¿Amor, estás bien?" y besarte para hacerte sentir mejor... Evidentemente ellas ya saben que tu alma les pertenece con sólo aspirarla en cada beso, cada estertor... Ellas siempre ganan.
El artista de acuarelas dará vida a una representación surrealista (si tienes suerte, claro) de tu corazón siendo devorado por quimeras.
El escritor tomará su máquina de escribir y con sus dedos deformes te dedicará su próxima novela.
Podría apostar que el director de cine o teatro te dirá que tú y tu historia son basura, aunque para el siguiente año mires el estreno de una película u obra de teatro con el mismo ámbito que tu sufrir.
Y el poeta... evidentemente será el que agoniza y pide una explicación o remedio a todos los anteriores, mientras termina su cerveza y recibe con sincero y lívido cariño los febriles besos de la bruja, haciendo a un lado al gato y asustando a los chaneques para entregarle a la bruja los estudios cardiológicos, la canción, la fotografía, las risas que el clérigo provocó, el diagnóstico psicológico, el cuadro surrealista, la novela, la película o de preferencia la obra de teatro, los besos, el cuerpo, la eternidad, la cordura, el alma y por último el corazón roto...para que ella, y sólo ella... lo repare con un hechizo.
-Angel García.
lunes, 5 de octubre de 2015
Credo a Lilith
No creo en un dios poderoso, creador de tierras y del cielo, sino en ti, clavándome al infierno en una cruz como si fuese Jesucristo. Creo en lo invisible y dudo de lo que veo, como imágenes santas de la iglesia.
Creo en ti, como deidad o mesías, partiendo la cama para abrir el averno y liberar demonios.
Diosa sin dioses, oscuridad de la noche, la verdad absoluta cubierta de mentiras y una piel desnuda y pegada a los huesos; creadora y creación, de la naturaleza, no de aquél "padre" anfitrión de una falacia creacionista.
A nosotros los hombres ofreces salvación a cambio de locura, y te ríes de los santos, que bajan del cielo, desde aquella cama en el inframundo. Te carcajeas de la charlatanería de María -que disque la violó una paloma-, y nos devoras; devoras hombres y mujeres; nos crucificas en tu sexo y nos guardas por tres días, aguardando la resurrección, según mil escrituras.
Y vendrás, de nuevo, para juzgar a los vivos y felicitar a los muertos, y tu dictadura no tendrá fin.
No creo en el espíritu santo, creo en tu sexo dador de vida que "ofende" al padre y al hijo por recibir la misma adoración y gloria, cortesía de nosotros los hombres, los poetas y de las mujeres también.
Creo en tu cuerpo como iglesia, no santa, ni católica ni judía, ni apostólica.
Confirmo que el bautismo a tu manera me encanta; aquél ritual de iniciación con el que me embarro de pecados sin perdón.
Espero la resurrección en tu cuerpo y una mejor vida para el mundo futuro.
Amén.
.Angel García.
Creo en ti, como deidad o mesías, partiendo la cama para abrir el averno y liberar demonios.
Diosa sin dioses, oscuridad de la noche, la verdad absoluta cubierta de mentiras y una piel desnuda y pegada a los huesos; creadora y creación, de la naturaleza, no de aquél "padre" anfitrión de una falacia creacionista.
A nosotros los hombres ofreces salvación a cambio de locura, y te ríes de los santos, que bajan del cielo, desde aquella cama en el inframundo. Te carcajeas de la charlatanería de María -que disque la violó una paloma-, y nos devoras; devoras hombres y mujeres; nos crucificas en tu sexo y nos guardas por tres días, aguardando la resurrección, según mil escrituras.
Y vendrás, de nuevo, para juzgar a los vivos y felicitar a los muertos, y tu dictadura no tendrá fin.
No creo en el espíritu santo, creo en tu sexo dador de vida que "ofende" al padre y al hijo por recibir la misma adoración y gloria, cortesía de nosotros los hombres, los poetas y de las mujeres también.
Creo en tu cuerpo como iglesia, no santa, ni católica ni judía, ni apostólica.
Confirmo que el bautismo a tu manera me encanta; aquél ritual de iniciación con el que me embarro de pecados sin perdón.
Espero la resurrección en tu cuerpo y una mejor vida para el mundo futuro.
Amén.
.Angel García.
Entre tus dedos
Entre tus dedos
viven los clavos de mi ataúd.
Los cigarrillos que te encanta fumar
luego de pulverizarme
con tu poesía vulgar,
oscura y húmeda.
Entre tus dedos
se encuentra el borde del precipicio.
La telaraña de una irrealidad.
Un acantilado que me separa
de la evaporación existencial.
Entre tus dedos
existe aquello que me incita
a entregar estos labios desérticos,
como ofrenda a lo que llevas dentro.
Entre tus dedos
se pierde mi cabello sucio
como el olor a tabaco resagado.
Entre tus dedos
se avistan los personajes
de mi espectáculo mental,
espectros y monstruos de un vals caótico
que bailan desentendidos, al compás de tu figura;
de mis ojos, quizá de suspiros.
El humo se desprende del cilindro
entre tus dedos.
Hipnótico elixir visual;
maldito mapa que me guía
a las islas de tu cuerpo.
Sales debajo de sábanas masacradas y cansadas;
con tus garras de cuervo me atrapas,
me estrangulas y me tragas
con los temores que nunca mencioné.
Tus uñas me laceran la carne
y me arrancan el traje hasta dejarme en los huesos.
Al final del show te escucho
susurrar, como para ti, "buen provecho".
Una mirada sádica,
la piel en el suelo
y unos dientes que muerden en círculos,
que succionan mi alma
y a veces la del cigarrillo.
- Angel García.
viven los clavos de mi ataúd.
Los cigarrillos que te encanta fumar
luego de pulverizarme
con tu poesía vulgar,
oscura y húmeda.
Entre tus dedos
se encuentra el borde del precipicio.
La telaraña de una irrealidad.
Un acantilado que me separa
de la evaporación existencial.
Entre tus dedos
existe aquello que me incita
a entregar estos labios desérticos,
como ofrenda a lo que llevas dentro.
Entre tus dedos
se pierde mi cabello sucio
como el olor a tabaco resagado.
Entre tus dedos
se avistan los personajes
de mi espectáculo mental,
espectros y monstruos de un vals caótico
que bailan desentendidos, al compás de tu figura;
de mis ojos, quizá de suspiros.
El humo se desprende del cilindro
entre tus dedos.
Hipnótico elixir visual;
maldito mapa que me guía
a las islas de tu cuerpo.
Sales debajo de sábanas masacradas y cansadas;
con tus garras de cuervo me atrapas,
me estrangulas y me tragas
con los temores que nunca mencioné.
Tus uñas me laceran la carne
y me arrancan el traje hasta dejarme en los huesos.
Al final del show te escucho
susurrar, como para ti, "buen provecho".
Una mirada sádica,
la piel en el suelo
y unos dientes que muerden en círculos,
que succionan mi alma
y a veces la del cigarrillo.
- Angel García.
miércoles, 26 de agosto de 2015
Oda al perro
El perro.
Un ente errante
en busca de amor
afecto y compañía.
Un ente errante
en busca de amor
afecto y compañía.
Herido hasta los huesos.
batallando contra
su misma especie;
destrozado hasta el aliento
por el descuido de otra
que se cree superior.
batallando contra
su misma especie;
destrozado hasta el aliento
por el descuido de otra
que se cree superior.
Vaga el pobre ser vivo,
entre andenes de la vida;
a través del tiempo
y de piernas gigantescas
de los humanos.
entre andenes de la vida;
a través del tiempo
y de piernas gigantescas
de los humanos.
Camina sin rumbo
por las calles que se cruzan;
atravesando umbrales;
viviendo en arrabales.
por las calles que se cruzan;
atravesando umbrales;
viviendo en arrabales.
Trata de llegar a un destino
incierto:
la familia tan amorosa
que lo abandonó a su suerte,
después de ser parte crucial
de la misma que lo desechó.
la familia tan amorosa
que lo abandonó a su suerte,
después de ser parte crucial
de la misma que lo desechó.
Pobre ser vagabundo.
Estrujado por el hambre;
sin noción o seguridad
del rostro que le muestra
el destino como obsequio.
Estrujado por el hambre;
sin noción o seguridad
del rostro que le muestra
el destino como obsequio.
Quizá la dama calavérica
venga, al fin, para expiar
su tormentosa condena
y librarlo, de una vez por todas,
del caótico holocausto social.
venga, al fin, para expiar
su tormentosa condena
y librarlo, de una vez por todas,
del caótico holocausto social.
-Angel García.
martes, 25 de agosto de 2015
Tecnoamante
Te diré un secreto.
Es algo burdo y con tanto sentido
como tu mísera existencia.
Es algo burdo y con tanto sentido
como tu mísera existencia.
Tú me amas.
No puedes negarlo. No puedes
vivir si mi ausencia te golpea.
No puedes negarlo. No puedes
vivir si mi ausencia te golpea.
Y odias eso.
Odias que te despierte en las mañanas;
en el gélido abrazo de la madrugada.
Odias que te despierte en las mañanas;
en el gélido abrazo de la madrugada.
Sin embargo, me haces dormir
entre tus brazos o en la otra almohada.
Podrás parlotear todo lo que quieras.
A fin de cuentas ellos pensarán
lo mismo que pasa por tus palabras.
A fin de cuentas ellos pensarán
lo mismo que pasa por tus palabras.
Pero la realidad es otra.
La realidad es que yo no soy el objeto
sino tú, como mi pobre herramienta.
La realidad es que yo no soy el objeto
sino tú, como mi pobre herramienta.
Mírame con desprecio, si quieres.
Pero me amas. Y me he convertido
en parte crucial de tu vida.
Pero me amas. Y me he convertido
en parte crucial de tu vida.
Me necesitas para no sentirte solo.
Y amas plenamente que te cante.
Y amas plenamente que te cante.
Soy tu amante, soy tu todo.
Tu mundo gira alrededor mío.
Tu mundo gira alrededor mío.
Tú te vuelves el engrane.
Un simple tornillo de aquella fábrica
perversa llena de máquinas mastodontes
macabras y reemplazables.
Te transformas en un pobre peón.
En otra simple sardina dentro de la red.
Y cuando me pierdas o al fin muera,
reencarnaré en algo similar, no como tú
que sólo serás reemplazado por otra tuerca.
Pero yo seguiré ahí,
tumbándote el cabello y los dientes,
acabando con tus ojos y tus neuronas.
Y jamás te desharás de mí.
tumbándote el cabello y los dientes,
acabando con tus ojos y tus neuronas.
Y jamás te desharás de mí.
Porque, a fin de cuentas,
tú sólo eres el humano esclavo
que juega a las deidades, y yo
tu dios electrónico. Tu tecnoamante.
tú sólo eres el humano esclavo
que juega a las deidades, y yo
tu dios electrónico. Tu tecnoamante.
Hasta entonces podrás ser mío
sin darte cuenta,
hasta ese día, al fin...
de que no valgo la pena.
sin darte cuenta,
hasta ese día, al fin...
de que no valgo la pena.
-Angel García.
lunes, 24 de agosto de 2015
En honor a ti
Bajo los efectos de la noche
podría contar, uno a uno,
los impactos que tu cuerpo
provoca sobre el mío
y no acabaría ni en el alba.
podría contar, uno a uno,
los impactos que tu cuerpo
provoca sobre el mío
y no acabaría ni en el alba.
Podría describir cómo es que
puedes hacer estremecer mi piel
con un simple roce de tus labios;
tal vez parlotear sobre tu demencia
me caería bien, como lluvia a la tierra.
puedes hacer estremecer mi piel
con un simple roce de tus labios;
tal vez parlotear sobre tu demencia
me caería bien, como lluvia a la tierra.
La oscuridad nocturna se torna bohemia.
Mientras algún trovador barato
le hace el amor a su guitarra,
mientras canta letras al azar
que su estado etílico le proporciona;
tal vez yo me vea en el rincón de un bar
escribiendo poesía en honor a ti;
ya sabes, mientras evoco el arco
que tu espalda forma cuando te excitas.
Imaginando tu torso desnudo,
con la negrura tan espesa de la habitación
como única prenda sobre tu cuerpo.
Mientras algún trovador barato
le hace el amor a su guitarra,
mientras canta letras al azar
que su estado etílico le proporciona;
tal vez yo me vea en el rincón de un bar
escribiendo poesía en honor a ti;
ya sabes, mientras evoco el arco
que tu espalda forma cuando te excitas.
Imaginando tu torso desnudo,
con la negrura tan espesa de la habitación
como única prenda sobre tu cuerpo.
Mientras fumamos y nos emborrachamos;
mientras reímos y lloramos por cualquier cosa.
Mientras cantamos y recitamos poesía barata.
mientras reímos y lloramos por cualquier cosa.
Mientras cantamos y recitamos poesía barata.
Todo a tu nombre, querida.
Esta página es dedicada a ti.
Esta noche llena de gatos, ladrones,
bohemios, poetas, brujas y monstruos.
Esta página es dedicada a ti.
Esta noche llena de gatos, ladrones,
bohemios, poetas, brujas y monstruos.
Esta noche tan plagada de espejismos
es dedicada a tu existencia en el cosmos.
Mientras que tú, probablemente, soñando
las cosas que sueles soñar, o recordando
a los fantasmas del pasado;
entristeciendo a la luna,
o carcajeándote con las estrellas, con los astros.
es dedicada a tu existencia en el cosmos.
Mientras que tú, probablemente, soñando
las cosas que sueles soñar, o recordando
a los fantasmas del pasado;
entristeciendo a la luna,
o carcajeándote con las estrellas, con los astros.
Tú con tus pensamientos, con tu locura,
y yo con mis deseos, los deseos que provocas.
y yo con mis deseos, los deseos que provocas.
¿Quién lo diría? Toda la noche dedicando
poesía, canciones, cigarrillos y cerveza
a la profundidad de tus pupilas, a su abismo
que me atrapa y me consume las entrañas;
dedicando mi tiempo y las palabras que salen
de la pluma a los ciclones que produce
tu aliento al mezclarse con el mío,
a los huracanes, que desestabilizan emociones,
provocados por tu aroma que rompe
el hedor que el cilindro de tabaco impregna.
poesía, canciones, cigarrillos y cerveza
a la profundidad de tus pupilas, a su abismo
que me atrapa y me consume las entrañas;
dedicando mi tiempo y las palabras que salen
de la pluma a los ciclones que produce
tu aliento al mezclarse con el mío,
a los huracanes, que desestabilizan emociones,
provocados por tu aroma que rompe
el hedor que el cilindro de tabaco impregna.
Toda la noche dedicada a tratar
de descifrar, al fin, el enigma
que tu cuerpo le regala a mi mente.
de descifrar, al fin, el enigma
que tu cuerpo le regala a mi mente.
-Angel García.
domingo, 23 de agosto de 2015
Analogía
Mujeres: lo más cercano a un dios.
Y dado éste punto, profundicemos.
Y dado éste punto, profundicemos.
Cabe aclarar que todos miran a un dios
como máximo, lo más hermoso y misericordioso;
aquella figura que debe ser venerada,
a la que se debe rendir tributo y plegaria;
aquello en lo que puedes cubrirte
en una tempestad enorme e impetuosa.
como máximo, lo más hermoso y misericordioso;
aquella figura que debe ser venerada,
a la que se debe rendir tributo y plegaria;
aquello en lo que puedes cubrirte
en una tempestad enorme e impetuosa.
Todos ven a un dios como algo magnifico,
un ser insuperable o inalcanzable
para nosotros, pobres mortales.
un ser insuperable o inalcanzable
para nosotros, pobres mortales.
Y, sinceramente, está bien.
Está bien comparar algo como el concepto “Dios”
con lo que es y conforma una mujer;
a fin de cuentas una mujer es eso y más.
Una mujer viaja más allá de lo que podemos describir.
con lo que es y conforma una mujer;
a fin de cuentas una mujer es eso y más.
Una mujer viaja más allá de lo que podemos describir.
Pero también tenemos que recalcar otro punto:
Un dios no es todo bondad…
Un dios es un psicópata,
un dios se torna indiferente, destructivo,
celoso y hasta posesivo.
Un dios no es todo bondad…
Un dios es un psicópata,
un dios se torna indiferente, destructivo,
celoso y hasta posesivo.
Un dios puede llevarse cualquier alma,
de cualquier individuo que se le ocurra,
y devorarla para luego desecharla
por el retrete, o por las nubes cuando llueve,
¿qué sé yo? Sólo soy un ente con una pluma.
de cualquier individuo que se le ocurra,
y devorarla para luego desecharla
por el retrete, o por las nubes cuando llueve,
¿qué sé yo? Sólo soy un ente con una pluma.
Un dios es un asesino de lacayos,
un apostador de esperanza,
un buen jugador de ajedrez.
un apostador de esperanza,
un buen jugador de ajedrez.
Un dios se puede enfurecer,
y si eso llegase a ocurrir,
todo a su paso se hace cenizas;
lo antes tan hermoso y bello
se torna de un gris caótico.
y si eso llegase a ocurrir,
todo a su paso se hace cenizas;
lo antes tan hermoso y bello
se torna de un gris caótico.
La ilusión se desmorona
y la realidad tan severa se instala frente a tus ojos.
y la realidad tan severa se instala frente a tus ojos.
Y, efectivamente, así es una mujer.
Una mujer es eso y más.
Destructiva e indiferente cuando gusta
y cuando no gusta serlo.
Una mujer es eso y más.
Destructiva e indiferente cuando gusta
y cuando no gusta serlo.
Una mujer es un dios en todo sentido:
es algo perfecto, algo destructivo;
el mejor paraje cósmico, y el más triste,
el más violento, el más bello,
todo y más a la vez.
es algo perfecto, algo destructivo;
el mejor paraje cósmico, y el más triste,
el más violento, el más bello,
todo y más a la vez.
Una mujer es lo más edénico, hermoso,
algo divino que, a su vez,
logra ser mortal y oscuro, infame y devastador.
algo divino que, a su vez,
logra ser mortal y oscuro, infame y devastador.
Una mujer es lo más cercano a un dios.
La única diferencia,
es que la mujer es real
y el dios innecesario.
La única diferencia,
es que la mujer es real
y el dios innecesario.
-Angel García.
¿De qué sirve?
Dicen que ese trozo de tela,
pintado de tres colores
y con un ave majestuosa en medio,
tiene una belleza inigualable.
pintado de tres colores
y con un ave majestuosa en medio,
tiene una belleza inigualable.
Que aquél cántico semi-religioso
y representado como un grito de guerra
es el más hermoso del mundo.
es el más hermoso del mundo.
¿Pero eso de qué sirve?
¿De qué sirve? Si aquél canto hermoso
lo entonan millones de voces al unísono,
pero con indiferencia, una indiferencia
absoluta y mortal; y con hipocresía
los “altos mandos”, la más bestial de todas.
¿De qué sirve? Si aquél canto hermoso
lo entonan millones de voces al unísono,
pero con indiferencia, una indiferencia
absoluta y mortal; y con hipocresía
los “altos mandos”, la más bestial de todas.
¿De qué sirve que aquella bandera
esté postrada en un alto mástil?
si está deprimida… llorando,
llorando por cómo la tratamos
y por cómo pervertimos lo que representa.
esté postrada en un alto mástil?
si está deprimida… llorando,
llorando por cómo la tratamos
y por cómo pervertimos lo que representa.
¿De qué sirve la gastronomía típica
de éste gran país? Si sus conciudadanos
prefieren los sucios y mundanos intentos de comida
que las multinacionales ofrecen.
de éste gran país? Si sus conciudadanos
prefieren los sucios y mundanos intentos de comida
que las multinacionales ofrecen.
¿De qué sirve una diversidad cultural?
Si las culturas mueren, poco a poco,
a gritos en oídos sordos.
Si las culturas mueren, poco a poco,
a gritos en oídos sordos.
¿De qué nos sirven un Teotihuacán,
un Xochicalco, o un Monte Albán?
Si preferimos tomarnos una foto
frente a la Torre Eiffel,
o “sosteniendo” la Torre de Pisa.
un Xochicalco, o un Monte Albán?
Si preferimos tomarnos una foto
frente a la Torre Eiffel,
o “sosteniendo” la Torre de Pisa.
¿De qué sirvió Zapata y sus ideales?
Ideales inquebrantables.
Si las sanguijuelas conservadoras
siguen privando nuestra tierra y nuestra libertad.
Ideales inquebrantables.
Si las sanguijuelas conservadoras
siguen privando nuestra tierra y nuestra libertad.
Dicen que la bandera no revolotea
porque no hay viento esta tarde.
A mí ya se me hizo mucha coincidencia.
porque no hay viento esta tarde.
A mí ya se me hizo mucha coincidencia.
Yo opino
que la patria está triste;
y por más viento que haya
ella no se animará
hasta que la apreciemos
y cortejemos
como sólo ella lo merece.
que la patria está triste;
y por más viento que haya
ella no se animará
hasta que la apreciemos
y cortejemos
como sólo ella lo merece.
-Angel García.
La dama plateada
Aquella dama,
que en las noches se aparece,
plateada e irreal,
que en las noches se aparece,
plateada e irreal,
como una ilusión dentro del sueño.
¿Quién es ella?
¿Musa de poetas,
escritores, bohemios y demás?
No es más que una ladrona de luz
a la estrella enorme rojiza,
y de suspiros a los infames enamorados.
No es más que un obsequio vano.
Un punto más al rostro de la noche.
¿Musa de poetas,
escritores, bohemios y demás?
No es más que una ladrona de luz
a la estrella enorme rojiza,
y de suspiros a los infames enamorados.
No es más que un obsequio vano.
Un punto más al rostro de la noche.
La oscuridad se vuelve menos
con su presencia;
entonando un cuarteto
con las estrellas que a lo lejos tocan.
Allí coloco mis pensamientos
tan vagos y efímeros.
con su presencia;
entonando un cuarteto
con las estrellas que a lo lejos tocan.
Allí coloco mis pensamientos
tan vagos y efímeros.
Podría dedicar una sarta de palabras;
un discurso tan vacío como su belleza.
Un discurso largo y simple
dentro de un círculo eterno.
un discurso tan vacío como su belleza.
Un discurso largo y simple
dentro de un círculo eterno.
Aquella dama es hermosa,
debo admitir.
Figura hipnotizante que estimula lágrimas.
Una droga celestial, cósmica y lumínica.
Una droga celestial, cósmica y lumínica.
Mientras tanto yo,
un ser abyecto y mal poeta,
que trató de seducirla con versos sin rima,
sin sentido, como pensamientos de loco;
tratando de dejarla sin palabras.
un ser abyecto y mal poeta,
que trató de seducirla con versos sin rima,
sin sentido, como pensamientos de loco;
tratando de dejarla sin palabras.
Ella siempre fue indiferente;
nunca me miró; nunca lo hará.
Sin ojos y sin compasión devora las almas
que dan luz, donde debería ser sombra.
nunca me miró; nunca lo hará.
Sin ojos y sin compasión devora las almas
que dan luz, donde debería ser sombra.
Me sirvo una dosis de su resplandor
a través de estos ojos
y quedo absorto frente a ella.
a través de estos ojos
y quedo absorto frente a ella.
Es temible, y la maldigo.
Al mismo tiempo me olvido,
por un momento, de esta vida,
de la realidad.
Me hace olvidar
el día que murió,
las personas que no nacieron.
Me hizo olvidar mi papel
sobre éste punto.
Me hizo mirarla
y amar su brillo.
Todo sin siquiera
voltear a verme.
-Angel García.
No existe
Dentro de éste texto tan ruin
me gustaría aprovechar y decir
que la noche es tan gélida
como tu alma o el infierno.
me gustaría aprovechar y decir
que la noche es tan gélida
como tu alma o el infierno.
Que tu ausencia es tan fuerte
y que ya no me queda
ni tu aroma a muerte enamorada
para aferrarme a lo que no existe.
y que ya no me queda
ni tu aroma a muerte enamorada
para aferrarme a lo que no existe.
Un dios muere en estos instantes
y un demonio llora en su lecho de muerte;
mientras yo me encierro en la oscuridad
del inminente habitáculo,
para guardar minuciosamente mi fe
que en tus pupilas ha dejado de existir,
matando así al dios previamente mencionado.
y un demonio llora en su lecho de muerte;
mientras yo me encierro en la oscuridad
del inminente habitáculo,
para guardar minuciosamente mi fe
que en tus pupilas ha dejado de existir,
matando así al dios previamente mencionado.
Sinceramente creo que mi hora se acerca
en éste momento bello y nocturno,
en éste espacio tan oscuro como el vacío;
y la verdad es que considero inútil
el hecho de rezar en una situación como esta.
en éste momento bello y nocturno,
en éste espacio tan oscuro como el vacío;
y la verdad es que considero inútil
el hecho de rezar en una situación como esta.
Aquél dios al que pude pedir plegaria
no se encuentra en la habitación,
se desangra mientras me desangro yo.
no se encuentra en la habitación,
se desangra mientras me desangro yo.
Toda esperanza ha dejado de existir.
Dios no existe dentro de éste cuarto
y tú, mi única deidad a la que rezaría,
ya no estás aquí, sino en el jodido
cementerio de mi memoria.
Dios no existe dentro de éste cuarto
y tú, mi única deidad a la que rezaría,
ya no estás aquí, sino en el jodido
cementerio de mi memoria.
-Angel García.
sábado, 8 de agosto de 2015
Desfragmentación de las burbujas
Las burbujas perecen al desmembrarse
en la explosión espontánea y sutil.
Colapsan y chocan de forma inminente
con la realidad construida por nosotros
y se desintegran al golpearse contra
los sofismas vanos e inservibles que adoptamos.
Las burbujas destellan, se estrellan
como meteoritos contra un planeta,
se estrellan con el aire y explotan
como el concepto de un dios
destructor de la belleza y desunificador
batiéndose contra la falta de fe.
en la explosión espontánea y sutil.
Colapsan y chocan de forma inminente
con la realidad construida por nosotros
y se desintegran al golpearse contra
los sofismas vanos e inservibles que adoptamos.
Las burbujas destellan, se estrellan
como meteoritos contra un planeta,
se estrellan con el aire y explotan
como el concepto de un dios
destructor de la belleza y desunificador
batiéndose contra la falta de fe.
Las burbujas perecen,
se les acaba el tiempo justo al nacer;
su eternidad se encierra en segundos,
algunas siquiera alcanzan a crearse…
Pese a eso,
podría asegurarte,
que disfrutan más ellas en su brevedad,
antes de ser desfragmentadas
por el rudo exterior, que tú
con tu eterno lamento sintiéndote un vil mártir.
se les acaba el tiempo justo al nacer;
su eternidad se encierra en segundos,
algunas siquiera alcanzan a crearse…
Pese a eso,
podría asegurarte,
que disfrutan más ellas en su brevedad,
antes de ser desfragmentadas
por el rudo exterior, que tú
con tu eterno lamento sintiéndote un vil mártir.
-Angel García.
domingo, 2 de agosto de 2015
El tiempo
Mira los segundos pasar tan veloces.
En una carrera, como colibríes o libélulas;
tan efímeros, tan rápidos y exóticos.
En una carrera, como colibríes o libélulas;
tan efímeros, tan rápidos y exóticos.
¿Cuántas veces intentaremos detenerlos?
Atrapar un colibrí sin matarlo... sin matarnos.
Atrapar un colibrí sin matarlo... sin matarnos.
¿Cuántas veces has capturado una libélula
sin acortar su tiempo de vida aún más?
¿Cuántos segundos puedes retener
sin perder unos cuantos milenios?
sin acortar su tiempo de vida aún más?
¿Cuántos segundos puedes retener
sin perder unos cuantos milenios?
El tiempo corre; míralo y trata de seguirlo.
Un ritmo tan rápido; inexistente.
Te carcome a cada parpadeo;
en cada fracción nos pudrimos
y el cuerpo no aguanta el peso.
Un ritmo tan rápido; inexistente.
Te carcome a cada parpadeo;
en cada fracción nos pudrimos
y el cuerpo no aguanta el peso.
Aquí estas, atrapado en el holocausto;
acostumbrado a la monotonía,
mirándome al espejo
siendo devorado, sin darte cuenta.
acostumbrado a la monotonía,
mirándome al espejo
siendo devorado, sin darte cuenta.
Y así será, amigo mío,
querida mía,
fantasmas míos,
hasta que nos demos cuenta
justo en el lecho de muerte,
en el borde del abismo,
de nuestro inminente final.
querida mía,
fantasmas míos,
hasta que nos demos cuenta
justo en el lecho de muerte,
en el borde del abismo,
de nuestro inminente final.
Hasta darnos cuenta justo en ese segundo
Justo cuando nos quedemos sin él;
ahí te darás cuenta
de que no podemos tratar de desafiar
a aquél joven-viejo,
que inventamos, llamado tiempo.
Justo cuando nos quedemos sin él;
ahí te darás cuenta
de que no podemos tratar de desafiar
a aquél joven-viejo,
que inventamos, llamado tiempo.
-Angel García.
sábado, 1 de agosto de 2015
Hermosa blasfemia
En este momento,
mi alma busca llenarse
de tu cuerpo perfecto e irreal;
mis pupilas se dilatan
y siento cómo fluye la sangre
por la danza corpórea de dos cuerpos.
mi alma busca llenarse
de tu cuerpo perfecto e irreal;
mis pupilas se dilatan
y siento cómo fluye la sangre
por la danza corpórea de dos cuerpos.
Mis torpes manos
buscan tus cabellos,
o tus caderas,
sinceramente no lo sé.
buscan tus cabellos,
o tus caderas,
sinceramente no lo sé.
Mientras nuestras bocas
se mezclan
en un solo aliento congelado;
y con movimientos bruscos
luchan nuestras almas
para no morir de placer.
se mezclan
en un solo aliento congelado;
y con movimientos bruscos
luchan nuestras almas
para no morir de placer.
Los harapos sobran
y la noche te viste de mí;
sólo de mí, y la nada.
Tus pies me encarcelan
y tus manos se llenan de hilos
que me hacen obedecer.
y la noche te viste de mí;
sólo de mí, y la nada.
Tus pies me encarcelan
y tus manos se llenan de hilos
que me hacen obedecer.
La curva perfecta de tus senos
que asemeja los cerros,
y tus caderas me transportan
a una ilusión
de movimientos oscilantes.
que asemeja los cerros,
y tus caderas me transportan
a una ilusión
de movimientos oscilantes.
No sé si estoy muerto
o si estoy más vivo que ayer.
Sólo sé que me quiero perder
en tu campo,
en el tiempo,
en tus pechos
en tu sexo.
o si estoy más vivo que ayer.
Sólo sé que me quiero perder
en tu campo,
en el tiempo,
en tus pechos
en tu sexo.
Sólo sé que en éste cuarto
tú eres Dios,
y yo el fiel ateo
que trata de cometer
la blasfemia más hermosa de todas.
tú eres Dios,
y yo el fiel ateo
que trata de cometer
la blasfemia más hermosa de todas.
-Angel García.
viernes, 31 de julio de 2015
Reflejos
Aquél hombre
despertó junto al vórtice demencial que su amada le provocó tiempo atrás en la
existencia; con dolor de alma tan fuerte como si explotara cada átomo y neurona
de su cuerpo inerte y tan frío como cadáver.
El sujeto sin
nombre, ni rostro. Ese ente que miraba al vacío tan inestable, antes de
recordar que es ciego. Aquél horrendo monstruo que no diferencía entre el bien
y el mal. “Todo es un espectro social”, se repite; “no eres un monstruo”, se
convence…
Entonces se mira al
espejo sólo para encontrarse con mis ojos justo enfrente de él, justo enfrente
de sus ojos; lo miro a él y a ella; pero niego su existencia sólo para que su
reflejo desaparezca de mí, del otro lado del espejo. Trato de extinguir su
existencia… pero si dudo, por un segundo siquiera, la quimera resiste, y me
atrapa, y me envuelve, me aprisiona, me abraza y me incrusta su filo, y me llena
de frío…y se apodera de mí; me transformo en él o él se convierte en mí; no sé
decirlo ni especularlo, lo que puedo calcular sin matemáticas es que estoy
jodido.
Para cuando
despierto… me encuentro del otro lado del espejo, en el lugar del reflejo y
junto al vórtice demencial que mi amada ha provocado en algún tiempo atrás de
la existencia; aquél que explota cada átomo y neurona de mi cuerpo inerte y
frío como un cadáver…
-Angel García.
miércoles, 29 de julio de 2015
Instrucciones para despertar
Antes que nada debo advertir al lector que el hecho de
despertar es una acción un tanto fácil pero fatal, a veces. Los pasos son un
tanto delirantes:
En primera, el sujeto debe darse cuenta del momento crucial
en el que el sueño está a punto de ser finalizado con todo y la firma de tu
subconsciente; no importa si es alguna pesadilla o ilusión, tal vez algún
espejismo ¿Qué sé yo?
Luego de reconocer el clímax y epílogo de la visión, el
soñador deberá aferrarse fuertemente a sus sábanas, tratando de evitar
cualquier contacto con el exterior a su mente (esto ayuda a tener algunos
segundos, si acaso minutos, más con tu sueño).
Tras haberse aferrado fervorosamente al paso anterior para
no perderse toda la obra teatral dentro de su cabeza (si ni siquiera intentaste
seguir dormido más tiempo entonces no eres un buen soñador), inevitablemente el
vínculo se romperá y la resolución se verá afectada; entonces un áspero rayo de
luz te golpeará, en los ojos, tan dolorosamente como una patada en los genitales.
Y es ahí cuando el individuo pasará al tercer paso: la resaca, o la realidad.
Una vez efectuado el tercer paso, el pobre quijote abre los
ojos abruptamente, y no le queda más que seguir recostado en la almohada,
escuchando el estruendoso sonido de las aves y sintiendo al sol como lija de
cerillos; mientras hace una lista mental del recuento de sucesos ocurridos en
el subconsciente cuando tenía los ojos cerrados.
Ahora bien. Lo único que le queda al personaje con cierto
afecto a los espejismos es mirar al rededor del cuarto, limpiarse las lagañas,
los mocos y las lágrimas; girar su cuerpo a modo que la cara termine frente a
la almohada, suspirar y escuchar al viento, que entra de la ventana a sus
poros, con la febril esperanza de que la realidad en la que acaba de despertar
no lo trate de asfixiar con la cobija o con la almohada, antes mencionada.
Después de un rato, tras no morir asfixiado, la persona se levanta y se
arregla, o no, para afrontar a aquella que no lo asesinó porque quería seguir
jugando con el soñador. Entonces, lo único que le queda al sujeto es esperar la llegada de otro sueño porque, como buen soñador, éste siempre buscará cualquier pretexto para soñar.
Nota: Éste manual funciona para personas dormidas ya sea literalmente, o no. De igual forma, el hecho de despertar seguirá siendo un tanto abrumador.
-Angel García.
martes, 28 de julio de 2015
Carta de un despechado
A lo largo del tiempo he aprendido el verdadero concepto
del amor; aquella, la mentira más grande de todas, inclusive más grande que la
religión.
He aprendido a odiar a aquellos proxenetas de palabras dulces y cursis denominados a sí mismos “poetas”… aunque tal vez estoy empleando mal el concepto; he sabido reconocer a los poetas que me repudian y a los que debo admirar. He aprendido que el amor no es como lo pinta la historia romántica o renacentista, que no es más que una ilusión esperanzadora, llena de anomalías y espectros que aparecen hasta el final de tal espejismo. He aprendido que no puedo “dibujarte la sonrisa con el borde de mi mano”, como el gran Cortázar dice, sin cumplir antes, o después, una condena; he aprendido que la “mujer perfecta” es aquella con la que sufres más; he aprendido que el amor es una pandemia, una enfermedad irremediable y contagiosa que infecta a todos y sin embargo nos embriaga y satisface. He aprendido que al amor lo sobreponen ante cualquier cosa, en especial ante la razón.
Y sobre todo he aprendido… que el amor nos carcome por dentro, nos devora como larvas a un ser en descomposición, nos destruye lentamente y no se detendrá, hasta mirarnos matándonos los unos a los otros, amándonos y desmembrándonos, hasta ver cómo el mundo se consume mientras esboza aquella sonrisa malévola con la que mostrará la satisfacción por haber cumplido su maldito y mundano objetivo.
- Angel García
He aprendido a odiar a aquellos proxenetas de palabras dulces y cursis denominados a sí mismos “poetas”… aunque tal vez estoy empleando mal el concepto; he sabido reconocer a los poetas que me repudian y a los que debo admirar. He aprendido que el amor no es como lo pinta la historia romántica o renacentista, que no es más que una ilusión esperanzadora, llena de anomalías y espectros que aparecen hasta el final de tal espejismo. He aprendido que no puedo “dibujarte la sonrisa con el borde de mi mano”, como el gran Cortázar dice, sin cumplir antes, o después, una condena; he aprendido que la “mujer perfecta” es aquella con la que sufres más; he aprendido que el amor es una pandemia, una enfermedad irremediable y contagiosa que infecta a todos y sin embargo nos embriaga y satisface. He aprendido que al amor lo sobreponen ante cualquier cosa, en especial ante la razón.
Y sobre todo he aprendido… que el amor nos carcome por dentro, nos devora como larvas a un ser en descomposición, nos destruye lentamente y no se detendrá, hasta mirarnos matándonos los unos a los otros, amándonos y desmembrándonos, hasta ver cómo el mundo se consume mientras esboza aquella sonrisa malévola con la que mostrará la satisfacción por haber cumplido su maldito y mundano objetivo.
- Angel García
lunes, 27 de julio de 2015
Existen dos tipos de poetas
Compadre, deje le
cuento:
Como ve, yo no soy bueno con eso de la poesía bonita; no soy bueno con las palabras dulces que hagan humedecer las bragas de las mujeres… repudio a esos poetas porque mueven los hilos tan sutilmente que, a mi parecer, llega a ser ofensivo para la víctima, y entonces, para mis ojos solamente, esos malditos se vuelven más abyectos que yo; usando metáforas empalagosas y tan llenas de diabetes y amor falso.
Como ve, yo no soy bueno con eso de la poesía bonita; no soy bueno con las palabras dulces que hagan humedecer las bragas de las mujeres… repudio a esos poetas porque mueven los hilos tan sutilmente que, a mi parecer, llega a ser ofensivo para la víctima, y entonces, para mis ojos solamente, esos malditos se vuelven más abyectos que yo; usando metáforas empalagosas y tan llenas de diabetes y amor falso.
¡Oh joder! Son unos
desgraciados, compadre; sentados en su cómodo sofá, tomando vino y frente a su
máquina de escribir o su computador que no deja huellas en la escena del crimen,
porque, cuando se equivocan, no pueden rayar el monitor, o
la hoja en la máquina, no señor; o hacen bolas la hoja de papel y lo desechan o
simplemente presionan la tecla “borrar” en la maldita comodidad de su asiento y
la jodida luz de la pantalla.
En cambio estamos
nosotros -porque sé que no soy el único… sé que no lo soy- los brutos,
los que ahuyentan con su obscenidad en metáforas que podemos transformar en
realidad; los de palabras directas y lacerantes de cruda verdad; los que
andamos siempre con una pluma y cigarros en los bolsillos; los que se mueven siempre
en los asientos públicos mientras esperan, los que no pueden estar acostados en
un sillón porque el hecho de mantenerse estáticos, inertes y cadavéricos,
esperando que, como una epifanía, las musas aparezcan frente a ellos, y como
autómatas escribir lo que nos dictan, no es de nuestro agrado. A ellas hay que
buscarlas hasta en el polvo que los astros desprenden, hasta en la muerte y en
los orgasmos; a las musas se les busca siempre, compadre.
A nosotros nos gusta
encorvarnos, escuchar el estruendo de las gotas contra el piso –cuando llueve-,
oír sus gritos de alivio antes de completar el suicidio; y también nos gusta
detestar el sonido del televisor encendido al fondo del cuarto.
Estamos nosotros,
compadre, los que no tomamos vino por ser caro, pero ¡Ah! Cómo bebemos cerveza
a raudales. Te digo, compadre, no sé cómo le haces para escribir frente a la luz
del monitor. Es más cómodo estructurar todo en la oscuridad etérea, amenazada
por una lívida luz al centro producida alguna vela tan acabada como la cerveza
que compré hace cinco minutos, y luego
salir del cuarto para apostar con la suerte, tirarse a la cama con un albur y
jugar a la ruleta rusa, a ver si las ideas penetran tu sien como balas saliendo
del revolver negro –que en éste caso es el cuarto- y escribir vulgarmente en
una hoja de papel, con faltas de ortografía y una letra espantosa, regular o
agradable a la vista, eso ya depende de la persona; y sobre todo con la
inseguridad de equivocarse y rayar o, peor aún, correr el riesgo de perder la
hoja o la libreta… estamos los que soportamos los rayones y las manchas de
noche en el texto.
¡Ah, pero eso sí! Nosotros
no somos falsos, compadre, nosotros podríamos amar a todas las mujeres del
mundo, como ustedes, pero no. Nosotros nos basamos en lo peculiar, nos
enamoramos de lo simple, de lo abrupto, nos fijamos en los defectos… en la
belleza del infierno.
Y si logramos ser
merecedores de aquél dicho infierno, a diferencia de ustedes, nos sentimos en
la gloria de no estar a salvo, al ser absorbidos por su huracán demencial y el
vórtice de su sexo, al perdernos en el cosmos de su cuerpo.
Le digo, compadre:
existen dos tipos de poetas. Los que despiertan a lo mucho con una pc portátil
o una máquina de escribir y una copa vacía; y los que despiertan con una libreta y la incertidumbre de sus pensamientos, o botellas de cerveza, o una mujer entre los brazos, o cigarrillos en las
manos, o un gato entre las piernas, o a veces todos juntos o a veces ninguno…
esos compadre… esos son los dos tipos de poetas que existen.
-Angel García.
El poeta
He aquí el hombre sin alma.
Un ente de cabellera dispersa
y transformador de sueños a letras.
Exhumador de esperanzas perdidas
y deseos aniquilados,
de pesadillas cumplidas.
Un ente de cabellera dispersa
y transformador de sueños a letras.
Exhumador de esperanzas perdidas
y deseos aniquilados,
de pesadillas cumplidas.
Aquél hombre sin conciencia,
testigo sin dios,
mina de cordura en el campo de guerra.
testigo sin dios,
mina de cordura en el campo de guerra.
Aquél que fuma sus decepciones
a través de las drogas o los cigarrillos,
esbozando una sonrisa patética,
intentando reprimir penas y tormentos
con aquellos dientes amarillentos.
a través de las drogas o los cigarrillos,
esbozando una sonrisa patética,
intentando reprimir penas y tormentos
con aquellos dientes amarillentos.
Devorado, poco a poco,
por los monstruos de su mente.
por los monstruos de su mente.
Sólo es piel,
sólo es huesos,
sólo es humo,
y quizá uno que otro diente.
sólo es huesos,
sólo es humo,
y quizá uno que otro diente.
Un ciego creído,
que atrapa con metáforas,
pobres almas perdidas y malditas.
que atrapa con metáforas,
pobres almas perdidas y malditas.
Un mal seductor,
siempre perdedor.
siempre perdedor.
Un infeliz que no merece
llamarse hombre;
un hombre muerto en vida.
llamarse hombre;
un hombre muerto en vida.
Un ente atrapado
en un purgatorio lleno de suciedad.
en un purgatorio lleno de suciedad.
Un bastardo con una pluma,
que se autodenomina
"Poeta".
que se autodenomina
"Poeta".
-Angel García.
domingo, 26 de julio de 2015
Visita al zoológico
Aquí estoy yo,
sentado en la banca de un zoológico mientras miro minuciosamente la gente que
se acerca a la jaula de los tigres. Excitados, aquellos animales humanoides, al
observar el feroz espectáculo. Dos tristes y enfurecidos felinos;
enardecidos y humillados, exigiendo que los liberen.
Especulando llego a la conclusión de lo estúpido que es pensar que ellos se han acostumbrado a tal cautiverio; ellos son como el soñador: desean la libertad. Todos los prisioneros de esta mazmorra turística quieren sueñan con ser libres.
Especulando llego a la conclusión de lo estúpido que es pensar que ellos se han acostumbrado a tal cautiverio; ellos son como el soñador: desean la libertad. Todos los prisioneros de esta mazmorra turística quieren sueñan con ser libres.
Es irónico y
aceptable asumir la idea de que los animales tienen más conciencia que
nosotros; a cuántos activistas y revolucionarios de sillón no habré escuchado
decir eso, mientras maldicen a los que piensan lo contrario. Retomando el
punto. Ellos fantasean con comer todo lo que les dé en gana, saltar sin ver
aquellas líneas negras de frío acero que les impiden seguir más allá o
aparearse sin el silencio provocado por los ojos que los miran fijamente, como
clavos en madera.
Ellos no se han
acostumbrado a la marginación; sin embargo, sus espectadores son otra cosa… lo
contrario, diría yo. Sus espectadores han confiado ciegamente en el espacio
dentro de la verja que el babuino le ha impuesto a cada uno. No se adaptaron,
sino que se conformaron; se conformaron a la privatización de sus sueños, de
sus fuerzas, de sus selvas… se conformaron tras ser arrebatados de su libertad
por un método tan sutil como el vuelo del mosquito.
Es imposible pensar
que somos mejores o más inteligentes que aquellos seres encerrados contra su
voluntad, si nosotros hemos sido puestos en una jaula a voluntad propia… sinceramente
me parece un tanto estúpido; pero bueno, se supone que nosotros somos los
racionales ¿no?
En fin, me despido,
no porque quiera, sino porque tengo que retirarme ya que pronto cerrarán el
zoológico y mañana tengo que entrar a las siete horas a un trabajo tan jodido
como éste banco, sólo para ganar aquella limosna que seguramente gastaré en
pañales, comida, impuestos y, si tengo suerte, quizá en otra entrada al
zoológico.
-Angel García.
Frustración por sobriedad
Aún tengo que lidiar con esto;
con la resaca provocada
por tu amor tan embriagante
como ese aguardiente barato.
con la resaca provocada
por tu amor tan embriagante
como ese aguardiente barato.
Me encanta, debo admitirlo;
me fascina sufrir aquella resaca,
sentir nostalgia emborrachándome
con antiguos recuerdos
para luego perder el sentido.
me fascina sufrir aquella resaca,
sentir nostalgia emborrachándome
con antiguos recuerdos
para luego perder el sentido.
Me encanta recordar, vanamente,
tus besos febriles en mi yugular
mientras mis dedos palpan tus ojos
y mis labios acarician tu aroma.
tus besos febriles en mi yugular
mientras mis dedos palpan tus ojos
y mis labios acarician tu aroma.
Y no está de más mencionar
que no quiero estar sobrio nunca;
no quiero olvidar esa historia,
las crisis emocionales
y las palabras que se ahogan
en una lluvia de ofensas.
que no quiero estar sobrio nunca;
no quiero olvidar esa historia,
las crisis emocionales
y las palabras que se ahogan
en una lluvia de ofensas.
Prefiero esto, sentirme patético,
prefiero desahogarme en pluma y papel,
en letras que entiendan mi pena.
prefiero desahogarme en pluma y papel,
en letras que entiendan mi pena.
Prefiero estar encerrado
en la oscuridad de este rincón,
atestado de insectos y pesadillas;
deshaciendo mi existencia
mientras tú piensas
que ahora sólo soy la sombra
de un vago recuerdo
que no vale la pena proyectar.
en la oscuridad de este rincón,
atestado de insectos y pesadillas;
deshaciendo mi existencia
mientras tú piensas
que ahora sólo soy la sombra
de un vago recuerdo
que no vale la pena proyectar.
-Angel García
Las frases de amor
¿Las frases de amor, me preguntas?
Las frases de amor
se quedaron en tus pupilas.
Las frases de amor
se quedaron en tus pupilas.
Son aquellas frases inspiradas
en tus rojos labios
al estremecer mi piel.
en tus rojos labios
al estremecer mi piel.
Las frases de amor
se quedaron ahogadas
con las lágrimas
que me haces derramar
en todas las gélidas noches.
se quedaron ahogadas
con las lágrimas
que me haces derramar
en todas las gélidas noches.
Aquellas que se pierden
en el infinito de tus lunares
y en el desierto de tu piel que ostento.
en el infinito de tus lunares
y en el desierto de tu piel que ostento.
En el alcohol y en el humo.
En el vano de las palabras.
En el vano de las palabras.
Las frases de amor
agonizaron y perecieron,
al fin, en ésta puta carta.
agonizaron y perecieron,
al fin, en ésta puta carta.
- Angel García.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)